Y aquí estoy en el
aeropuerto de mi pueblo, esperando a embarcar en un avión rumbo a algún país de
Europa del este. El tiempo pasa lento y pese a mi catarro puede diferenciar ese
olor a café tan característico de todos los aeropuertos del mundo y mientras me
tomo un refresco y me como un bocadillo de jamón, esperando que anuncien mi
puerta de embarque soy consciente de la cantidad de mierda que tiene la
pantalla de mi ordenador.
La vida pasa lenta en los aeropuertos y o te buscas la vida
para entretenerte o te pasa como los que tengo en la mesa de al lado que se
quejan (con su acento que se me antoja del sur) de lo inmensos que se hacen las
esperas y lo insoportable que son estos
tiempos muertos, mientras se comen una manzana.
Y yo que a veces hilo fino para entretenerme y no morir de hastío con mi
propia manzana.
La verdad es que el aeropuerto de Bilbao es bastante
práctico y funcional, sin embargo tiene ese gran pero que tienen todos o por lo
menos todos los aeropuertos de España en lo que he estado hasta ahora, el WIFI
es de pago. Incluso en nuestra cutre Termibus (terminal de autobuses de Bilbao)
tenemos WIFI gratuito. En este tema cualquier país europeo me parece que nos da
tres vueltas. Bueno en esto y en mucha otras cosas, porque si una cosa tienen
los europeos es que listos son un rato, que si dicen que nos tienen que rescatar pues nos callamos y que nos
rescaten, que si dicen que hagamos recortes pues recortamos de donde no tenemos
y punto. A lo que iba que son más listos que nosotros, ya que como es sabido
siempre desde tiempo inmemoriales, los europeos nos hemos hechos ricos a cuenta
de otros más pobres y esta vez nos toca
ser la “chica fea del baile”, pese a que nuestro déficit sea inferior que el de
muchos otros países europeos y sin embargo nuestra prima la de riesgos está
volando por las nubes (tan alto que los especuladores se deben de estar
forrando a nuestra cuenta) que no digo que la culpa de nuestra crisis la tengan
sólo ellos, pero entre que España tiene un montón de problemas estructurales,
una panda de políticos ineptos que se dejan manipular por una panda de banqueros corruptos y una
patronal que en la mayoría de los casos barre para su casa, la cosa se está
poniendo más que jodida achuchada . Siendo honesta me paso el día dando vueltas
a lo listos que son unos y lo tontos que
somos otros, así que necesito desconectar y en caso de ver una televisión ser
incapaz de entender cualquier cosa, y si
nos rescatan y el miércoles ya no somos sino Alemania que salga el sol por
Antequera; de aquí a comer “currywurst”, a hablar alemán y a ir de veraneo
todos los años a Benidorm o Mallorca.
Por cierto mis
vecinos de mesa confirman que son de Huelva. Saludos y hasta mañana con
bonitas fotos.
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